Guillermo Hermoso de Mendoza toreando con ‘Extraño’, ayer en Évora.
Su próxima actuación, en Pamplona, llegará precedida de triunfos consecutivos, como, entre otros, en Madrid, Nimes y Alicante. Fotografías: pablohermoso.net
Ganado: Seis toros de Francisco Romao Tenorio, colaboradores en conjunto.
Rejoneadores: Marcos Bastinhas (saludos en ambos); Miguel Moura (vuelta en ambos); y Guillermo Hermoso de Mendoza (vuelta en ambos).
Lugar y fecha: Plaza de toros Arena d’Evora (Portugal). 25 de junio de 2022.
Incidencias: Lleno. Actuaron los forcados amadores de Évora.
Guillermo Hermoso de Mendoza regresaba a la plaza donde recibió su bautismo torero en Portugal. Un bautismo significativo por lo que representa la lidia en el país vecino y sobre todo la exigencia de un público mucho más habituado al toreo a caballo que en el resto del mundo taurómaco.
Llegaba un Guillermo mucho más asentado que en aquella ocasión y con bastante más experiencia en general aunque no precisamente en esa lidia que parece igual….pero sólo es parecida. Se le notaba la presión al joven navarro en los prolegómenos del festejo, si bien pronto mostró que los nervios no habían entrado al ruedo con él.
Ante su primero, destacó con Berlín, con un toreo hasta entonces no marcado en estas Arenas. Un toreo basado en la banderilla, pero con argumentos para que la lidia tenga continuidad y no sea solo clavar. Porque clavar, clavó, y muy bien, con reuniones muy ajustadas y marcando los tiempos en todas ellas, sino que además entre banderilla y banderilla hubo bue toreo, despacioso en los galopes de costado y a cámara lenta con las hermosinas, en las que Berlín abanicaba con su cola la cara del toro en cada cambio de grupa, arrancando las mayores pasiones en los tendidos.
Y llegó el sexto y con él la mayoría de edad portuguesa de un rejoneador que está dejando huella este año allí por donde pasa. Importante Sevilla, importante Madrid, Nimes, Alicante….pero más importante si cabe lo que Guillermo hizo ayer en Évora y con este complicado sexto de la tarde. En el país del caballo torero, dejó una impronta de cómo lidiar a un toro bruto, complicado, que siempre se defendía por alto.
Al final, apareció con Disparate y la lidia continuó por derroteros de mucha calidad, sobre todo en los embroques y todos ellos, con mucha emoción por esa violencia sorda que tenía el toro. Disparate estuvo majestuoso en todo momento, con banderillas ajustadas, al estribo y muy redondo en todo momento. Lidió y venció al toro y la faena fue tomando altos vuelos de manos de este binomio mágico que cerró la faena más redonda hasta la fecha de Guillermo en el país del toreo a caballo.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX