Toro llamado ‘Conde’, número 82, de La Palmosilla, reseñado para la próxima Feria de San Fermín.
Asegura, sin embargo, que el encierro de Pamplona fue muy del gusto de la plaza, con mucha vida y movilidad.
La cita del 13 de julio era muy importante para la ganadería, ya que suponía el debut en los sanfermines de Pamplona. La corrida exhibió una gran movilidad en el encierro y en la plaza, según Javier Núñez, ganadero de La Palmosilla.
Así lo asegura en una entrevista publicada en la revista ‘Aplausos’. Entrevista que prosigue de la siguiente manera: «Después de la corrida de Sevilla de 2018, nos pidieron una para Pamplona. Era un compromiso, así que fuimos preparando la corrida para poder tener un mínimo de 12 toros. Allí no se andan con chiquitas y si la corrida no vale te dan descanso. Era una apuesta arriesgada; es un escaparate a nivel nacional y mundial. Todo resultó más que satisfactorio, nos hemos ganado un hueco y volveremos este año».
‘Vendaval’, número 5, de La Palmosilla, reseñado también para Pamplona.
Javier Núñez habla emocionado del recuerdo de los sanfermines. No en balde mantiene una estrecha relación con la ciudad, “porque allí estudié y tengo muchos amigos”. La prueba se superó con nota, “porque fue una corrida muy del gusto de la plaza, con mucha vida y movilidad. Ya se vio en el encierro y se completó por la tarde. Además de ese conjunto de movilidad, hubo tres toros con clase. La gente se quedó muy contenta y espero que podamos volver muchos años más a esa gran fiesta del toro”.
Sevilla y Pamplona fueron dos grandes puertos para La Palmosilla. A final de julio lidió una corrida en la localidad de Tudela. “Fue un día de muy mal tiempo, y también hubo tres y tres. A cada torero –Jesulín, El Cid y Cayetano- le tocó un toro bueno. Fue una corrida de tipo medio, lidiada cerca de las tablas por culpa del viento, tampoco hubo mucha gente, en fin, que no salí del todo satisfecho. Quizá haya sido la corrida que menos me gustó de la temporada”.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX