Un mozo ha sido trasladado al hospital por una fuerte contusión en el brazo.
El cuarto encierro de las fiestas de Tudela, protagonizado por los toros navarros de Merino Garde, de Marcilla, ha sido el más peligroso y lento hasta la fecha. Un toro rezagado ha provocado momentos de tensión, sobre todo en el último tramo de la carrera, donde se han producido varios sustos y caídas.
Un mozo ha sido trasladado al hospital en esta parte del recorrido, por una fuerte contusión en el brazo. Los astados de Marcilla han protagonizado el encierro más lento -5 minutos y 47 segundos-, precisamente por este toro rezagado que ha corrido separado de la manada y desorientado.