Francisco Marco en el momento de recibir la placa y la txapela de reconocimiento de la afición de Tolosa.
El diestro navarro recibió una placa y una txapela conmemorativas de su paso por esta plaza guipuzcoana.
Un grupo de aficionados de Tolosa, encabezados por el reconocido, veterano y querido empresario Antxon Elosegui, homenajeó recientemente al diestro navarro Francisco Marco. Y lo hizo en la centenaria plaza de toros de Guipúzcoa y a los postres de una sabrosa alubiada con todos sus sacramentos.
A los postres, Marco, que estuvo acompañado por el novillero pamplonés Francisco Expósito, recibió de manos del citado Elosegui una placa y una txapela conmemorativas de su paso por esta plaza. Al final de la jornada, los aficionados guipuzcoanos sacaron a hombros, por la puerta grande de la plaza tolosana, a Francisco Marco.
El matador de toros estellés toreó dos tardes en el coso tolosarra, con muy distinta suerte. En la primera, el 16 de junio de 2002, en la que alternó con Finito de Córdoba y Rivera Ordóñez, sufrió una grave cornada en la parte interior del muslo derecho cuando toreaba al primero de su lote, Gritón, de la ganadería Alcurrucén.
Y la segunda, al año siguiente, el 29 de junio, en la corrida conmemorativa del centenario de la plaza de toros, un festejo que se celebró al estilo goyesco. Compartió cartel con Rivera Ordóñez y Julián López ‘El Juli’. Marco le cortó una oreja al primero de su lote y saludó a una ovación cuando dobló el sexto.
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Festejos taurinos Pamplona, S. XIX