Ayudado de El Capea el año pasado en la plaza de toros de Tudela.
El matador de toros salmantino rememora sus vivencias ante la muerte de Víctor Barrio.
Pedro Gutiérrez “El Capea”, según sus propias declaraciones, ha vivido la temporada más dura de su carrera, una campaña marcada por su actuación en Las Ventas y por la muerte de Víctor Barrio. “Lo que ocurrió alrededor de mi actuación en Madrid me dolió y me afectó mucho. No lo digo por las críticas, que soy el primero en aceptarlas, sino por las faltas de respeto que sentí ese día. Salí muy tocado y estuve semanas que no quise saber nada de nadie”, reconoce el matador de toros.
Tras esta actuación en Madrid, llegó la de Tudela. “Me conmovió mucho la muerte de Víctor Barrio, aquello fue otra losa. Ver a un compañero perder lo más preciado que tenemos, que es la vida, me acabó de hundir. Recuerdo que, cuando iba a torear en Tudela, que fue la primera corrida que toreaba después de Madrid y de la muerte de Víctor, a finales de julio, iba moralmente hundido; era como viajar hacia un pelotón de fusilamiento”, confiesa el salmantino en una entrevista publicada en Aplausos.
En Tudela mató por primera vez en su carrera un toro de Miura y otro de Dolores Aguirre, y todo salió bien. “Le corté una oreja al de Dolores y al de Miura se la podía haber cortado pero fallé con el descabello. Aquello fue un reto que me dio mucha moral, como pude demostrar en las otras dos corridas que toreé en Herencia y en Illescas. Al final, ha sido una temporada de luchar contra mí mismo y esa batalla la he ganado”, concluye El Capea.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX