Fue distinguido en una gala que contó con la presencia de diversos matadores de toros y del ganadero Victorino Martín.
El rejoneador navarro Roberto Armendáriz recogió recientemente en la capital cántabra el trofeo al mejor rejoneador de la pasada feria de la capital cántabra. Y lo hizo en una gala celebrada en el Hotel Chiqui, que estuvo presidida por el alcalde, Íñigo de la Serna, quien entregó a Carlos Fitz-James Stuart, duque de Huéscar, el premio a la aficionada ejemplar, concedido a su madre, la duquesa de Alba.
El caballero de Noain se hizo acreedor por primera vez de este galardón por la actuación que protagonizó el pasado 21 de julio frente a dos buenos toros de Ángel Sánchez; le cortó una oreja a su primero, y tuvo fuerte petición de la segunda, y dio la vuelta al ruedo tras despachar al sexto, en una tarde en la que alternó con Pablo Hermoso de Mendoza y Leonardo Hernández.
En la citada gala, también fueron premiados Jiménez Fortes (triunfador de la feria), Luis Bolívar (mejor estocada), Manuel Escribano (mejor debutante y mejor par de banderillas), Miguel Ángel Herrero (mejor puyazo), Roberto Bermejo (mejor brega), David Adalid (mejor subalterno), David Casas (mejor labor periodística) y Victorino Martín (mejor ganadería, corrida mejor presentada y toro más bravo).