Desplante de Pepe Moral ante un toro de Jandilla el pasado 7 de julio en la plaza de Pamplona.
El diestro sevillano se enfrentó el 7 de julio a dos toros de Jandilla y, tras estoquearlos, en ambos recibió el silencio del público.
“Reconozco que Pamplona ha sido el gran hándicap para mí de este año. A esa plaza le tengo un cariño especial y este año no se me dio bien, los dos toros míos no sirvieron y salí muy disgustado. Me ha dado mucho y este año no he podido darle lo que quiero y lo que siento por ella”.
Son declaraciones de Pepe Moral en una entrevista publicada en el semanario ‘Aplausos’, entrevista que continúa con la siguiente pregunta.
¿Hacen daño este tipo de tardes?
«Sobre todo psicológicamente. Quedé un poco tocado porque vas con unas ideas, con unas cosas en la cabeza y luego no sale nada de lo que tienes en mente. Creo que incluso hace más daño personal que profesionalmente».
El matador de toros sevillano ha realizado nueve paseíllos esta temporada, compromisos en los que ha cortado ocho orejas. Ninguna de ellas en Pamplona, plaza en la que toreó sin suerte alguna el 7 de julio. Aquella tarde se lidiaron seis toros de Jandilla (segundo y sexto con el hierro de Vegahermosa), bien presentados, aunque desiguales, muy armados, nobles, justos de fuerza y sin clase, salvo el cuarto que la tuvo y repitió con fijeza.
El torero andaluz se encargó del segundo y del quinto, y su resultado fue de silencio tras dos avisos y silencio tras aviso, en una tarde en la que el gran triunfador fue López Simón (oreja con fuerte petición de la segunda y dos orejas). Completó el cartel Juan José Padilla (silencio y silencio tras aviso).
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX