Pablo Hermoso de Mendoza firmó una nueva puerta grande en Jilotepec.
El veterano caballero navarro cortó en esta plaza del estado de México el octavo rabo de su campaña en tierras americanas.
Ganado: Toros de Javier Garfias, segundo y cuarto, y Raúl Cervantes, de buena presencia, entre los que destacó el cuarto por su buen juego
Rejoneadores: Mario Sandoval (silencio tras tres avisos), Pablo Hermoso de Mendoza (oreja y dos orejas y rabo) y Leonardo Zatarain (silencio y dos orejas)
Lugar y fecha: Plaza portátil en Jilotepec, estado de México. 1 de diciembre de 2023.
Incidencias: Un tercio de plaza. Noche muy fría. Los Forcados Amadores de México fueron muy ovacionados tras lograr cuatro pegas durante la corrida. Zatarain y el caballero navarro salieron a hombros.
El destino llevó a Pablo Hermoso de Mendoza y a la localidad de Jilotepec a juntarse precisamente en esta última temporada del rejoneador. Un debut y despedida que siempre tendrá un sabor especial y que pasará a la historia del toreo a caballo porque el jinete de Estella lidió en esta noche su toro número cinco mil. Se dice pronto desde aquel Pardillo, de César Moreno, con el que tomó la alternativa el 18 de agosto de 1989, hasta este Cincomil, de Javier Garfias, han transcurrido treinta y cuatro años, o más bien temporadas en las que se ha escrito la historia más importante del toreo a caballo y se han firmado unos números de auténticos records.
Y si el toro Cincomil pasará a la historia por ser una cifra tan redonda en la carrera de Pablo, también pasará por ser uno de los toros más complicados de esta temporada. En ningún momento hizo nada con templanza e intercambiaba mansedumbre con violentos arreones para terminar enculado en tablas en el último tercio. Un regalito que no mereció para nada el honor que le tocó en suerte.
Lástima que no hubieran salido en orden inverso, porque el Salvador al que Pablo tumbó el rabo sí fue un gran toro, digno del honor a haber entrado en la historia. Un toro al que Pablo pudo lucir su toreo, sus embroques de frente en los rejones con Nómada, espectacular el segundo; el temple de Talento o la valentía de Ilusión, encarado al toro, que embestía con codicia y dando emoción a la lidia. Cerró con debutante Orfeo y mató al primer intento para pasear en triunfo los máximos trofeos junto al ganadero Javier Garfias.
Por último, entre esos cinco mil toros están el toro de su alternativa, el que lo proyectó a las grandes ferias en Zaragoza, el del rabo en Sevilla, los de los rabos en la plaza México, los que le hicieron conquistar a la exigente afición portuguesa, los indultados tanto en América como en Europa, y por supuesto todos aquellos que le permitieron realizar faenas que han quedado inscritas con letras de oro en la historia de la Tauromaquia.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX