El ruedo de la plaza de toros de Sangüesa estaba inundado.
Podría celebrarse el próximo 30 de septiembre, coincidiendo con las Jornadas de elogio a la Pocha.
No pudo ser, los novilleros no pudieron vestirse de luces y no llegaron a salir del hotel. Las lluvias acumuladas durante todo el día por la borrasca que afectó sobre todo al noreste de Navarra anegaron el firme del ruedo sangüesino.
El ayuntamiento notificó rápidamente la noticia a sus vecinos a través de mensajería, mientras seguía lloviendo sobre la ciudad. En el mensaje se explicaba que la devolución de las entradas ya adquiridas se realizará tras la finalización de las fiestas.
De este modo, no pudieron hacer el paseíllo los novilleros Luis Rivero, Pablo Polo y Bruno Martínez. La intención de la empresa Tauronavarra, regente del coso
sangüesino, es que el festejo pueda llegar a celebrarse en fechas próximas. Se da la circunstancia de que tal y como están redactados la mayoría de los reglamentos taurinos autonómicos, al haber corrido el encierro, los erales de la ganadería de Emilio Galán Trilla sólo podrían ser lidiados en la plaza de Sangüesa.
De manera que la empresa quiere proponer al ayuntamiento alguna fecha para celebrar finalmente el festejo. Una de las posibilidades sería hacer coincidir el festejo con el fin de semana de las Jornadas de elogio a la pocha de Sangüesa, a celebrarse el fin de semana del sábado 30 de septiembre.
Información de Pascal Lizarraga, publicada en Diario de Navarra.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX