HERMOSO DE MENDOZA ARRASA EN EL COMIENZO DE SU CAMPAÑA EUROPEA

El caballero navarro comenzó su temporada europea con un triunfo contundente.

Cortó las cuatro orejas y los dos rabos del lote de cuatreños que lidió en la plaza francesa de Palavas les Flots.

Lugar: plaza de toros Palavas les Flots (Francia).

Ganado: Seis toros de Hermanos Sampedro, de buen juego en general, con un primero premiado con la vuelta al ruedo.

Pablo Hermoso de Mendoza: cuatro orejas y dos rabos.

Leonardo Hernández: silencio en ambos.

Manuel Manzanares: oreja en ambos.

Incidencias: Tres cuartos de plaza. El navarro comenzó su campaña europea.

Pablo Hermoso de Mendoza logró el domingo en la plaza francesa de Palavas un histórico pleno triunfal tras cortar las cuatro orejas y los dos rabos de su lote de toros, de Hermanos Sampedro, en el que fue el inicio de su temporada europea.

Compartió cartel con Manuel Manzanares, que le acompañó en la salida a hombros tras obtener dos orejas -una de cada uno de su lote-, y Leonardo Hernández, que recibió el silencio del público en sus dos intervenciones.

El jinete navarro, que abrió el festejo, se encontró en primer lugar con un buen toro, que se enceló pronto en la cola de Disparate, un potro que debutó en México y se presentó ayer en Europa. En banderillas, con Chenel ofreció un recital de largo y templado toreo de costado, con ajustadísimos cambios por los adentros; después Ícaro llevó literalmente pegado al estribo al toro a lo largo del anillo, al ritmo que marcaba la montura. En el tercio final, con Pirata, clavó tres cortas muy reunidas y sin respiro, y terminó con un rejonazo de efectos fulminantes. Máximos trofeos para el torero y vuelta al ruedo póstuma para el toro.

La historia se repitió con el cuarto de la tarde, un toro menos colaborador que el anterior pero con transmisión por sus complicaciones. Lo recibió con Villa, montura que debutó asimismo en Europa y que fue enseñando a embestir al de Hermanos Sampedro. Seguidamente, el navarro puso al rojo vivo los tendidos con los quiebros precisos y preciosos de Van Gogh, tras clavar las banderillas al estribo. La fiesta continuó con el hijo más aventajado de Cagancho, con Manolete, que deslumbró con su galope de costado y sus piruetas. Terminó la faena con Pirata, con un par a dos manos en los medios para el recuerdo y con un efectivo rejón letal, que permitió la concesión, otra vez, de las dos orejas y el rabo del cuatreño. En definitiva, pleno de trofeos para el estellés, en el mejor arranque posible de su temporada europea.