El presidente no accedió a la petición de la segunda para Marco en la plaza mexicana de Jerez
El diestro estellés viaja a Venezuela para torear el próximo sábado en la feria de San Felipe
El diestro navarro Francisco Marco logró pasear el domingo pasado un trofeo en la plaza mexicana de Jerez, en el estado de Zacatecas, aunque “el público pidió con fuerza las dos orejas pero el presidente se negó a conceder la segunda”, indicó ayer el estellés mientras se desplazaba a México D. F. para viajar rumbo a Venezuela, donde torea el sábado en la feria de San Felipe, una de las más antiguas de ese país americano.
El matador de toros navarro, vestido de azul rey y oro, hizo el paseíllo con los diestros mexicanos Manuel Mejía, que fue ovacionado, y con Fermín Espínola, que logró las dos orejas del sexto.
Se lidiaron seis toros de la ganadería de Rosas Viejas, de escasa calidad, salvo los dos últimos, que resultaron más toreables.
El primero que le correspondió a Marco fue un manso total, burriciego, que restó cualquier opción de triunfo. El diestro estuvo por encima de él, dio la cara y lo mató de una estocada, esfuerzo que fue recompensado con una ovación del público.
El quinto cojeó de salida y fue protestado por los tendidos, pero, sin embargo, después fue a más y Marco lo aprovechó totalmente, por ambos pitones, mediante una faena muy completa, que culminó con un espadazo. Como se ha indicado, el respetable pidió las dos orejas pero el palco sólo concedió una.
Ante tal situación, con hambre de triunfo, el diestro navarro regaló el sobrero, del hierro de Malpaso, un cinqueño adelantado, brusco, difícil, que fue a menos y acabó desarrollando sentido. Pese a ello, Marco llevó a cabo un buen inicio de faena, hasta que se lo permitió el toro. Según el periódico Imagen, de Zacatecas, “pudo conseguir al menos una oreja más de no ser por las fallas con la espada que lo alejaron de los trofeos”. Así fue. El propio Marco confirmó ayer que lo mató de dos pinchazos y dos golpes de descabello, lo que no impidió que recibiese una nueva ovación.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX