Debutaron por las calles de esta localidad los novillos del hierro de Iván López, empresario de la plaza.
Los novillos del empresario de la plaza de toros Iván López pisaron ayer, por primera vez, el asfalto adrianés, protagonizando el encierro más peligroso y emocionante de los seis que se han celebrado en las fiestas de las Santas Reliquias. Reacios a salir de los corrales, los erales lo hicieron de uno en uno, obligando a los mansos a emplearse a fondo.
Tras el primer astado, que completó el recorrido sin incidentes, el segundo novillo golpeó el vallado en varias ocasiones, con más ahínco en el tramo situado en la última curva de la Carretera de Estella. La res obligó a los mozos a subirse al vallado y al público a retirarse hasta la puerta de hierro, provocando momentos de tensión. El encierro duró 14 minutos.
Por lo demás, el espectáculo finalizó sin heridos, la misma tónica del resto de los festejos. La empresa Ambulancias del Olmo, dirigida por Ángel Julián Martínez, sólo ha realizado dos atenciones por contusiones, que no han requerido traslados al centro de salud. Junto al director, el equipo sanitario está integrado por dos enfermeras, DianaLópez y Ana Rosa Jiménez; el técnico Raúl Sánchez, la médico Daimé Pérez y el cirujano Domingo Cortón.
Información y fotografía de Mari Paz Gener para Diario de Navarra.