Como cada año, terminada la misa, los socios del taurino pamplonés posaron en la escaleras de los Carmelitas Descalzos.
Al mediodía de ayer, los aficionados pamploneses acudieron a la iglesia de Carmelitas Descalzos para asistir a una solemne misa, en la que se recordó a los socios fallecidos. Galería fotográfica: Club Taurino de Pamplona.
El Club Taurino de Pamplona celebró ayer su fiesta anual, de manera similar a como lo lleva haciendo durante 67 años, en esta ocasión con la celebración de una misa. La jornada festiva comenzó al mediodía en la iglesia de los Carmelitas Descalzos, donde se ofició una Eucaristía en la que se recordó a los socios fallecidos.
El año pasado, debido a la pandemia provocada por el Covid 19, los socios, capitaneados por su presidente, José María Sevilla, no pudieron disfrutar después de la tradicional comida de hermandad, aunque varios, por su cuenta y en grupos pequeños, compartieron mesa y alargaron así la jornada festiva.
En esta ocasión, la fiesta recuperó la normalidad, y el salón del club sirvió de escenario para una concurrida comida de hermandad, que, a los postres, estuvo amenizada por variada música y hasta por la actuación de un Dj (disc jockey), una buena muestra de la adaptación del taurino a las tendencias actuales.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX