El tercer encierro de las fiestas se prolongó más de seis minutos.
Cruz Roja solo atendió a un mozo que durante el encierrillo anterior sufrió un esguince que no requirió traslad.
Seis minutos y medio de carrera, con tres minutos de diferencia entre la manada y una res rezagada en el último tramo de la avenida de Yerri, resumen el tercer encierro matutino de las fiestas de Estella. La sexta vaca retrasó la cita que se cerró sin heridos. Cruz Roja solo atendió a un joven en la barricada de San Miguel, durante el encierrillo anterior, por un esguince leve que no requirió traslado.
Pese a ser lunes, y día laborable para muchos habituales, el encierro de ayer tuvo una alta participación que se notó después en las gradas de la plaza de toros, abarrotadas durante las primeras vaquillas y animadas con la música de la charanga Malababa, que acompaña estos días a la peña San Andrés.
Según varios de los aficionados que saltaron al ruedo, el tamaño del ganado era menor que el de los días anteriores, un factor positivo para los mozos, que supieron aprovecharlo con saltos y quiebros durante todo el espectáculo. En particular, Bittor Ávila Aguirrezabala, natural de Hernani de 23 años, y el lerinés Ibai Piudo Suescun, de 22 años, que se repartieron los cien euros que premian los mejores recortes.
Primera presidencia
En equipo, los dos vencedores saltaron en varias ocasiones las reses de Macua. Un espectáculo que contó también con quiebros de los recortadores que ayer se animaron, hasta medio centenar se juntaron en la arena.
“Nos hemos conocido participando en este tipo de eventos”, explicó Ibai Piudo. El edil Unai Errazki (EH Bildu), aficionado a los espectáculos de tauromaquia popular, presidió por primera vez el palco del coso estellés y entregó el premio a los dos jóvenes vencedores. “Le han echado ganas”, afirmó.
Información de Susana Esparza para Diario de Navarra.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX