Guillermo Hermoso de Mendoza se presentó en esta plaza navarra y no salió a hombros por fallar con el rejón letal.
Ganado: Un toro de Rosa Rodrigues y otro de Pablo Hermoso de Mendoza para rejones, primero y cuarto, parado el primero y con más movilidad el otro, y cuatro de Ojailén, de aceptable presentación, discretos de cara, asticortos, nobles, sosos y justos de fuerza.
Toreros: Guillermo Hermoso de Mendoza (saludos y oreja), Emilio de Justo (oreja y saludos) y El Payo (saludos tras aviso y dos orejas).
Lugar y fecha: Plaza de toros de Cintruénigo (Navarra). 8 de septiembre de 2024.
Incidencias: Más de tres cuartos de plaza. Tarde agradable. El Payo salió a hombros.
Emilio de Justo, que venía de matar seis victorinos en Valladolid la víspera, realizó dos lidias entre mecánicas y voluntariosas donde destacaron los naturales a pies juntos con los que terminó la labor del segundo toro al que cortaría una oreja.
Octavio García, El Payo, mejoró mucho la imagen que dejó en Estella en el mes de agosto. Vistoso con el capote, su primer toro se lo brindó a Sergio Sánchez y tuvo algún momento de especial lucimiento con naturales aislados y un soberbio pase de la firma. Como se atascó con los aceros, tuvo que esperar al sexto para congraciarse con el triunfo, donde localizó una bandera de México en el tendido de las peñas y allí se fue a brindarles el toro.
Ayudado por el mocerío y echándole ganas, logró tandas estimables con un torete de Disney que tenía pocas ganas de dejarse los riñones embistiendo. Se volcó sobre el morrillo El Payo en la estocada y cortó las dos orejas que le permitían salir a hombros.
Dados los últimos festejos de rejones que se han celebrado en Navarra, ver en la arena a Guillermo Hermoso de Mendoza supone un lujo asiático para el espectador. Aunque su primer toro, de Rosa Rodrigues, no se movió mucho, se ayudó de Alquimista con el rejón de castigo y Justiciero en banderillas para conectar con los tendidos.
Con el toro que llevaba el hierro de la casa, pegó con Ecuador tres quiebros espectaculares y calentó a los tendidos con Justiciero realizando algún ‘levade’. Como falló con el rejón de muerte, algo extraño en él, no acompañó a El Payo a hombros.
Crónica de Mariano Pascal, publicada en Diario de Navarra.