El encierro navarro de Olite fue arrastrado sin seis de sus doce orejas. Imágenes: Julio César Sánchez.
Ganado: Seis toros de Hermanas Azcona, de juego variado, aunque buenos en líneas generales y con clase. El cuarto fue premiado con la vuelta al ruedo.
Toreros: Esaú Fernández (oreja tras aviso y dos orejas tras aviso), Javier Orozco (vuelta al ruedo tras aviso y dos orejas) y Ruiz Muñoz (oreja y palmas).
Lugar y fecha: Plaza de Torralba de Calatrava (Ciudad Real). 13 de marzo de 2022.
Incidencias: Un cuarto de plaza. Se guardó un minuto de silencio por José Ruiz ‘Calatraveño’. Jaime Berbejo saludó tras parear al sexto. Fernández y Orozco salieron a hombros.
La ganadería navarra Hermanas Azcona lidió ayer en Torralba de Calatrava una corrida variada, en la que hubo tres toros buenos –tercero, cuarto y quinto-, y otros tres de peor juego. Uno de ellos, el cuarto, llamado Acerado fue premiado con la vuelta al ruedo.
Según publica Julio César Sánchez en Aplausos.es, el ímpetu y las ganas de Esaú Fernández salieron a relucir en el primero de la tarde, la disposición del torero siempre estuvo presente y sobre la base de la firmeza consiguió hilvanar su puesta en escena, a pesar de la poca fuerza de su antagonista.
En el cuarto, el torero de Sevilla pudo disfrutar de buenas embestidas para desarrollar su concepto del toreo largo y poderoso. Y aunque lo cuajó de manera intermitente, tuvo fases de acople y mucha intensidad.
Javier Orozco apuntó muy buenas maneras en el segundo, que siguió la condición del anterior, cosa que no fue impedimento para que Orozco no se aburriera y sacara provecho del animal que le tocó en suerte.
Al encastado quinto, Orozco le dio un buen trato y dominó en muchas fases de su puesta en escena, aunque también aparecieron altos y bajos. Aun así, su buen concepto quedó a la vista de los congregados en la plaza.
Por el palo del arte y del sabor cimentó su labor Ruiz Muñoz. Su concepto clásico y personal caló en los tendidos. Supo aprovechar las opciones del astado de Hermanas Azcona para elaborar una buena faena. Nada pudo hacer con el rajado sexto, prácticamente imposible.