UN NOVILLO LEVANTA EL VALLADO EN MILAGRO Y CORNEA A UNA MUJER

Al fondo, el novillo levana el vallado.

Al fondo, el novillo levana el vallado.

La herida intentó subir a una barandilla pero el toro no le dejó y se la llevó arrastrada varios metros.

Una mujer de 47 años sufrió ayer una cornada en el muslo después de que un novillo levantara el vallado final del encierro y le embistiera cuando cruzaba por una zona para transeúntes en las fiestas de Milagro. La mujer fue trasladada al hospital en ambulancia y los festejos taurinos de la tarde quedaron suspendidos en la localidad.

La Policía Foral se personó en el lugar e investiga cómo el morlaco, de la ganadería funesina de Adrián Domínguez, pudo levantar la valla horizontal, formada por tres alturas de tablones de madera reforzados con barrotes metálicos verticales, y salir del recorrido del encierro.

El suceso ocurrió sobre las ocho menos cuarto de la tarde. La localidad celebraba el Día de la Mujer, pero la cogida no tuvo lugar en la suelta de vacas en la plaza sino en el encierro de la tarde. Un novillo llegó al final del recorrido y levantó la valla, la lanzó por los aires y accedió a una zona de paso que sirve para entrar y salir de la plaza, situada al otro lado.

La herida, Eva San Adrián, salía precisamente del coso, donde se estaba celebrando el Día de la Mujer. Entonces, se encontró de frente con el novillo. “Ella intentó subirse a una barandilla de un paletón”, contaba una testigo. “Llegó a subir las piernas, pero el toro la ha sacado y se la ha llevado varios metros. La ha cogido varias veces”, añadía. En una de las embestidas, le asestó una fuerte cornada en el muslo derecho.

Volvieron al toro

Una de las dos ambulancias que cubren el festejo se desplazó hasta la plaza mientras un grupo de jóvenes sacaba en volandas a la mujer herida del lugar donde fue embestida. Otro grupo de recortadores citó al toro y consiguió que volviera al recorrido del encierro. De esa zona entre el encierro y la plaza no hay salida a otras partes del pueblo.

La cogida generó momentos de incertidumbre y nervios en la plaza, muy concurrida en ese instante. Mientras llegaba la ambulancia hasta la herida, tres médicos locales la asistieron. A pesar del torniquete que le habían colocado en primera instancia, la sangre no paraba de salir. A continuación, fue trasladada en ambulancia al hospital. El suceso provocó la suspensión de los festejos taurinos.

 

Información de Enrique Pejenaute publicada en Diario de Navarra.

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