TRES SALIDAS DEL TORO CON SOGA ENCIENDEN LA PASIÓN EN LODOSA

El segundo toro de la jornada nada más salir. Fotografía: Montxo A. G.

Hubo 16 atenciones, incluida la de la lodosana Verónica Baigorri con una cornada en el glúteo.

La primera jornada del espectáculo del toro con soga de Lodosa se saldó con 16 atendidos, siete por la mañana y nueve por la tarde. La herida más grave, una vecina de la localidad, Verónica Baigorri Lodosa de 30 años que, al final del segundo toro de la mañana, sufrió un traumatismo craneoencefálico en el momento que el morlaco arremetió contra varios aficionados cuando iba a ser introducido en el camión.

Mientras la lodosana era traslada en ambulancia de Cruz Roja al hospital de Estella, se le detectó una cornada en el glúteo que, en un principio, no se vio ya que no sangraba. El resto de los heridos de la mañana lo fueron por erosiones de distinto tipo y por caídas.

Durante la salida del toro con soga de la tarde, Cruz Roja realizó nueve atenciones, entre ellas la de un menor de 15 años, vecino del municipio, que sufrió rotura de muñeca, cúbito y radio. El resto de los corredores atendidos, lo fueron por caídas de distinto tipo.

Como cada tercer fin de semana de septiembre, desde 1881, las fiestas en honor a la Virgen de Las Angustias de Lodosa llevan a las calles al toro con soga, un espectáculo que este año ha sido declarado Fiesta de Interés Turístico de Navarra, por “su singularidad y por su probada tradición” y ha entrado a formar parte de una grupo actos señalados entre los que se encuentran celebraciones como el Encierro del Pilón de Falces, el Tributo de las Tres Vacas o el Carnaval de Lantz.

En principio y hasta el próximo domingo, estaba previsto que el toro con soga saltase del camión -situado junto a la plaza de La Cruz (iglesia)- en seis ocasiones, dos por día. Pero, ayer por la mañana, se rompió la norma. En lugar de uno, fueron dos los astados los que recorrieron las calles lodosanas.

A las 12 de la mañana, tal y como estaba previsto, salió del cajón Cascabel, un morlaco colorado de 490 kilos de la ganadería de Juanjo Laparte de Marcilla. En la calle, las gradas con capacidad para 400 personas estaban llenas y en la calle se vieron muchas caras conocidas entre los mozos que esperaban al toro. Cascabel salió templado, amagó a ambos lados de la calle Ancha e inició el trote hacia la zona del Poyo. Media hora después, la cuadrilla que este año, como novedad, financió los toros del viernes, decidió, ante el poco juego que estaba dando el primer toro, que no se movió de la zona, recogerlo y sacar al sobrero, ensogado también esa misma mañana en la plaza y que protagonizó la única cogida de la jornada.

Por la tarde, fue el turno de Hortelano, un toro colorado, de 550 kilos, en este caso de la ganadería de Eulogio Mateo de Cárcar, que también fue subvencionado por la cuadrilla de aficionados. El astado protagonizó varios sustos y momentos de tensión.

Hoy sábado, el toro con soga saldrá a las 11.30 horas y, por la tarde, a las 18.30 horas. La jornada incluye, a las 13 horas en el Paseo, una degustación de pimientos del piquillo de Conservas Perón.

Información de Mari Paz Gener para Diario de Navarra.