El encierro de Zahariche, al completo, superó ayer el reconocimiento veterinacio, al igual que los toros de Fuente Ymbro.
Horas después, al mediodía, permanecían tranquillos en su corral del Gas, ajenos a todos. Unos comían, otros aprovehaban la sombra y alguno, cansado de soportar tanto calor se refugiaba a la sombrea. Era tal la paz, que, al final, todos optaron por echarse. Sus imágenes son las siguientes: