Tras lidiar y matar dos toros muy complicados de Boquilla del Carmen, salió a hombros con sus compañeros de cartel, también rejoneadores. Fotografías: pablohermoso.net
Ganado: Un novillo, primero, y dos toros de Boquilla del Carmen, segundo y quinto, otros dos de Xalmonto, tercero y sexto, y otros dos de Castorena, cuarto y séptimo, de buen juego en términos generales.
Rejoneadores: Pablo Hermoso de Mendoza (palmas y dos orejas), Jorge Hernández Gárate (oreja y dos orejas) y Cuauhtemoc Ayala (dos orejas y vuelta tras aviso).
Lugar y fecha: Plaza de toros Chano Ramos en Ameca, estado de Jalisco. 10 de febrero de 2024.
Incidencias: Lleno. Tarde agradable. Corrida de rejones de Carnaval. Actuaron los forcados de Monsaraz y los Amadores de México, que realizaron una buena pega. Los tres rejoneadores salieron a hombros.
Con este festejo en Ameca comenzó ayer un fin de semana frenético que transitará hasta el próximo martes, en el que Pablo Hermoso de Mendoza se irá despidiendo de los Carnavales de Jalisco en diferentes plazas del estado.
La primera cita fue en Ameca y no empezó con buen pie porque Pablo se tuvo que enfrentar a un toro muy aquerenciado a la manga del lienzo y que siempre salía escupido hacia esa zona. Tuvo que porfiar mucho, tanto de salida con Portobelo, como luego con Talento para sacarlo de esa zona y, cuando lo hacía, esquivar sus arreones siempre con la cara arriba. Índico fue quien encontró al toro ya menos aquerenciado y más en los medios y le llegó muy bien atacando de frente para salir muy redondo de la suerte y sobre todo ajustando las piruetas. Después, tras la pega de los Forcados Amadores de México, el toro, ya muy parado y defendiéndose por alto, no colaboró para nada con Nilton, ni en las cortas ni en el rejón definitivo, desluciendo el final de la trabajada lidia. Aplausos.
Y todavía más complicado de lidiar resultó el cárdeno que saltó en segundo lugar para el navarro. Un astado rajado, siempre eludiendo el compromiso para luego dar arreones con la cara alta. Un toro muy complicado al que Pablo antepuso técnica, omitiendo la brillantez y jugándose la piel de los caballos en cada embroque. Los jabatos en esta ocasión fueron Regaliz, que fue el único con el que el toro se empleó y galopó con son, Nairobi, Ilusión y Generoso que fueron una y otra vez a sacar el toro de sus querencias, a aguantar embestidas sin ton ni son y encima a cumplir con su labor de pasar por la cara del toro para que su jinete dejase los palitroques. Una faena dura y poco gratificante que tuvo el premio de la entrega de la gente de Jalisco que al final quiso y empujó para que Hermoso de Mendoza se despidiera de Ameca saliendo a hombros del ruedo.