El rejoneador navarro ha anunciado que hará una donación “de las dos actuaciones de este fin de semana para el movimiento de defensa llamado Tauromaquia Mexicana”.
Tras la prohibición en Guadalajara impuesta por un juez de celebrar las corridas de toros programadas para el 26 de noviembre y 3 de diciembre en la plaza Nuevo Progreso, muchas han sido las voces que se han levantado a modo de protesta. Una de ellas ha sido la del rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza, que se iba a despedir de esta plaza y su afición este pasado domingo. Ha difundido el siguiente comunicado:
“El día de hoy me levanto con un gran vacío en mi corazón, y con un sentimiento de impotencia y de rabia, al no poder desarrollar mi profesión.
Desde el momento en que pasó por mi mente el despedirme de mi México querido, una de las citas que más ilusión me hacía era la de la Plaza Nuevo Progreso de Guadalajara. Esta gran plaza que siempre me ha recibido con los brazos abiertos y en la que he podido expresarme a lo largo de tantos años de carrera.
El día de hoy no podrá ver como realizo uno de mis más grandes sueños que era el despedirme de esta afición. Esta afectación no solamente es hacia mi persona, sino también a todo el equipo que trabaja conmigo; desde subalternos, caballerangos, transportista del camión de mis caballos, el veedor de los toros y lógicamente todos los puestos de empleo que generan los espectáculos taurinos, de los cuales viven muchas familias mexicanas que el día de hoy no podrán llevar ese sustento a sus hogares por el gran desconocimiento que se tiene, en base a lo que gira en torno a una corrida de toros.
Aprovecho este medio (Aplausos) para pedir a las autoridades que respeten mi libre derecho a realizar mi profesión, que es lícita y que genera una cantidad importante de empleos, pero sobre todo una derrama económica que beneficia al municipio y al estado de Jalisco.
El suspender esta corrida tiene una gran afectación también en los aficionados de todo el país y de los países vecinos, que con tiempo compraron sus vuelos y sus hoteles para darme un emotivo adiós.
Mi carrera está llegando a su punto final, pero deseo seguir apoyando y defendiendo la Tauromaquia. Les pido a los aficionados que ahora más que nunca, defendamos nuestras tradiciones, que son parte de nuestra cultura y el legado que dejaremos a las próximas generaciones, que serán parte de su identidad, por eso quiero hacer público un donativo de las dos actuaciones de este fin de semana, que es un grano de arena, para el movimiento de defensa llamado Tauromaquia Mexicana, esperando que este recurso sea utilizado para lograr la democracia que en estos momentos tanto necesita la tauromaquia”.
Un día antes, mientras viajaba de Durango, de donde salió en hombros tras cortar dos orejas; a Ciudad Lerdo, en el estado de Durango, Pablo Hermoso de Mendoza, asombrado, y rumiando su coraje por el impedimento de poder despedirse de Guadalajara, una plaza en donde muchas tardes ha triunfado, fijó su postura ante este intransigente hecho provocado por un juez llamado Luis Alberto Márquez Pedroza, azuzado y coludido con un grupúsculo de “antis” que obligaron a la empresa a suspender el festejo.
“Muy dolido, contrariado. Las cosas no se hacen así, lo hicieron a lo cochino. Han aprovechado para tocar un punto que más le duele a la fiesta, una plaza que con más fuerza está dando toros en estas últimas temporadas. Una plaza que se llenaría, que sería una fecha social muy importante, entonces han esperado al último momento, porque mandar una notificación dos o tres días antes del evento me parece que no son las formas”.
“Nadie entendemos que a partir de una denuncia de unos cuantos, que no son comparables con los miles que acudirían a la plaza a mi despedida, llegue un juez y cierre la plaza, pare un evento de esa magnitud, sin dar tiempo, ni de hacer uso de recursos”.
“Yo la verdad no lo entiendo y espero que esto se arregle pronto porque no me voy a ir de la fiesta sin haberme despedido de Guadalajara, de su gente. Esto es una cacicada”, aseveró el hombre que ha sido, es y será el parteaguas del toreo a caballo en la historia mundial.
Hermoso de Mendoza confió en que esto pueda revertirse lo más pronto posible: “No sólo por mí, por toda la fiesta, por la cultura nacional, por la libertad y los derechos de la gente que viven como suyo un espectáculo lícito”.
“Nosotros somos personas que pagamos nuestros impuestos, que estamos dentro del marco legal, un espectáculo lícito”, concluyó.