Óscar Lorente falló a la hora de matar en San Esteban de Gormaz. Fotografía: archivo.
Bajo una plaza llena, realizó dos buenas faenas pero no estuvo acertado con el rejón letal.
El veterano rejoneador navarro Óscar Lorente está yendo a más y prueba de ello es la actuación que protagonizó ayer en la plaza soriana de San Esteban de Gormaz, que registró un lleno de ‘no hay billetes’. En ella, toreó mano a mano con Sergio Pérez, que firmó un triunfo rotundo, de cuatro orejas y un rabo. Ambos lidiaron toros de Hermanos Segura, de Linares, que ofrecieron buen juego.
El caballero de Huarte se fue de vacío porque el rejón letal se lo impidió. Tras una buena faena, al que abrió plaza lo pinchó y tuvo que descabellar. Al tercero, tras un primer rejón, lo pasaportó de un metisaca, del que rodó el toro sin puntilla. El público agradeció el esfuerzo del navarro tributándole sendas ovaciones.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX