Contó con la ayuda de los subalternos Asier Campos y Pablo Simón, y salió a torear también el novillero pamplonés Alejandro Bonel.
Invitado por el ganadero Iosu Uría, Francisco Marco toreó el sábado pasado en la conocida como ‘Maestranza del norte’, en la plaza guipuzcoana de Azpeitia, ante un un pequeño grupo de aficionados y amigos del citado criador de bravo.Bien auxiliado por los banderilleros Asier Campos y Pablo Simón, el matador de toros estellés probó la bravura de tres novillos y una utrera, que respondieron a su origen, a su procedencia, Santa Coloma en pureza. En este sentido, es preciso recordar que Uría compró una punta de vacas a Chafick, que tenía lo que era San Martín.
Marco estuvo a gusto en la cara de este ganado, al que va conociendo cada vez mejor, pero, sobre todo, toreó magistralmente al tercero y último novillo, que sobresalió del conjunto por su raza y motor.
Después de cada actuación del diestro navarro, salió a pegar unas tandas el novillero pamplonés Alejandro Bonel, que mostró buenas maneras y dejó detalles de su progresión en lo que fue un buen entrenamiento para Marco de cara a su cita del 9 de julio en Pamplona.