Hermoso toreando ayer en Las Ventas al segundo de su lote sobre ‘Ícaro’.
El caballero navarro no anduvo nada certero a la hora de matar a los dos de su lote.
Ganado: Cinco toros de San Pelayo y uno, el sexto, de El Capea, bien presentados y de juego variado.
Rejoneadores: Fermín Bohórquez (silencio en ambos), Pablo Hermoso de Mendoza (silencio y saludos) y Leonardo Hernández (dos orejas y oreja).
Incidencias: Plaza de toros de Las Ventas (Madrid). Lleno de “no hay billetes”. La infanta Elena asistió al festejo en la contrabarrera de toriles, acompañada de sus dos hijos, Froilán y Victoria Federica. Bohórquez toreó por última vez en Madrid. Hernández salió a hombros.
Pablo Hermoso de Mendoza no tuvo suerte ayer en Las Ventas ni con la materia prima ni con el rejón letal, factores que provocaron que se fuera de vacío.
El segundo, distraído de salida pero después manejable, se encontró con un Hermoso muy entregado, que puso todo de su parte tras brindar su labor a la Infanta Elena. Destacó con Berlín y sobre todo con Dalí, antes de poner banderillas cortas con Pirata. Malogró el premio por el mal uso del rejón de muerte.
Encastado y exigente el toro que hizo quinto. Hermoso de Mendoza, a lomos de Disparate expuso mucho en una labor dominadora y con técnica, arriesgando mucho la montura y levantando clamores con la hermosina. Sobre Ícaro piso los terrenos del animal con caras a caras en círculo y remató con un par a dos manos sobre Pirata antes de pinchar en cinco ocasiones perdiendo de nuevo los trofeos. Una pena.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX