Fue uno de los muchos actos programados en la ciudad ribera con motivo de la Virgen del Villar.
La ciudad de Corella disfrutó ayer de un encierro con novillos, marcados con el hierro de Merino, de Marcilla, y, como se puede apreciar en la imagen, muy bien criados. Fue uno de los actos programados con motivo de la Virgen del Villar. Todavía muchos aficionados mantienen la esperanza de que esta bonita ciudad recupere las corridas de toros que se celebraban en esta festividad, festejos a los que acudía poca gente si coincidían con la romería al santuario del Villar.