Cayetano, pase por alto rodilla en tierra el pasado 11 de julio, una suerte muy propia de su abuelo Antonio Ordóñez.
El diestro madrileño mantiene un recuerdo muy grato de la tarde de su debut en la Feria de San Fermín.
Cayetano Rivera Ordóñez guarda muy bien en su memoria su debut en Pamplona, el pasado 11 de julio, que llegó después de cumplir casi once años como matador de toros de alternativa. Este buen recuerdo se recoge en sendas entrevistas publicadas en los dos principales semanarios taurinos. En uno de ellos reconoce, además, que está deseando “volver a torear en Pamplona”.
En el semanario ‘6 Toros 6’, el entrevistador asegura que debutó en la plaza de Pamplona “justo cuando se cumplían cincuenta de la presentación de su padre, el siempre recordado Paquirri, en San Fermín”, a lo que Cayetano responde:
“Esa fecha era muy especial incluso antes de torear, pues suponía un reto muy grande, y no sólo por lo que esa plaza ha representado en mi familia, también por cómo iba a reaccionar yo en ese entorno, tan distinto a todos los demás. Una vez que llegué a la plaza tengo que reconocer que la ilusión fue creciendo cuando vi a la gente demostrarme tanto cariño… y la verdad es que estoy deseando volver”.
La prueba de San Fermín la superó con creces Cayetano, pues además de cortar dos orejas -una de cada toro de Jandilla que estoqueó-, lo cierto es que se sintió muy a gusto durante toda la tarde, convirtiéndose desde ese día en torero de Pamplona, se asegura en la citada publicación.
Y los elogios continúan en otra entrevista publicada en la revista ‘Aplausos’. “Ha sido una ilusión tremenda. Me preocupaba cómo me podría afectar el entorno, el bullicio de los tendidos… pero al final todo era cuestión de mentalizarse, de entender que ellos viven la fiesta así y que tú puedes formar parte de ella o no ir, que es lo que hice en años anteriores. Y este año me mentalicé para estar y hubo una gran conexión desde que llegué a la plaza, hubo mucho cariño y yo quise corresponderles, me metí en la faena y salieron las cosas bien”.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX