Triple puerta grande, tras repartirse los rejoneadores siete orejas de buenos toros de Bohórquez.
Ganado: Seis toros de Fermín Bohórquez, de muy buen juego en conjunto, salvo los dos últimos, que mansearon.
Rejoneadores: Pablo Hermoso de Mendoza (oreja y dos orejas), Andy Cartagena (dos orejas y ovación) y Guillermo Hermoso de Mendoza (oreja en ambos).
Lugar y fecha: Plaza de toros de Úbeda (Jaén). 2 de octubre de 2021.
Incidencias: Primera de feria. Dos tercios del aforo total. Los tres rejoneadores salieron a hombros.
El primero de la tarde fue un animal algo suelto de salida, al que Pablo Hermoso consiguió encelar y templar. Jugando mucho con los cites de frente, puso cuatro pares soberbios y dos cortas por los adentros en el cierre de obra. Mató de rejonazo entero, aunque un punto trasero y contrario, pero suficiente para que el animal cayese. Oreja.
Con pasadas de pleno clasicismo y momentos de gran temple, paró Pablo Hermoso al cuarto, un animal al que se pasó cerca en la faena, en un trasteo que tuvo su momento álgido con una emocionantes cortas. Terminó con un rejonazo y cobró las dos orejas de un toro que tuvo calidad.
Guillermo Hermoso templó muy mucho al tercero de Bohórquez sobre los dos costados mediante un toreo en círculo. Puso dos banderillas al quiebro en una faena de pleno clasicismo. Con cuatro cortas provocó el delirio del tendido, montando a Ecuador. Pero un pinchazo previo al rejonazo definitivo evitó el premio doble y paseó en triunfo finalmente un solo apéndice.
El sexto fue un astado que no ayudó para nada a Guillermo, que tuvo que fabricarse la faena a base de casta y de buena doma. Raza del navarro, que llevó de costado con valor al toro, demostrando una gran doma en su porfía para que embistiese. Mató de rejonazo y descabello y paseó, de nuevo, otra oreja, la que le abría la puerta grande de Úbeda.
Al segundo, Andy Cartagena, lo recibió con espectacularidad. El alicantino se encontró un animal justo de fuerzas al que tuvo que ir sujetando durante toda la lidia. Brindó su faena a Espartaco. El segundo par a dos manos lo puso sin cabezada en un momento de plena conexión. Tres cortas al violín clavó en el epílogo, mató de rejonazo trasero y contrario. Paseó en triunfo dos orejas.
El quinto fue un animal que salió con muchos pies de toriles, y avisó de lo que después fue una realidad: que era un manso de libro. Se manifestó más ese defecto en el tercio de banderillas, que fue cuando pegó la espantada. Espectacularidad de Andy ante un animal que no le ayudó por esa mansedumbre. Lo descordó al entrar a matar. Leve petición de oreja no concedida.