El novillero pamplonés se lució ante un serio utrero, al que mató de una estocada hasta el puño. Fotografías: Philippe Latour y Gil Mir.
Bruno Martínez no desaprovechó la oportunidad que tuvo en la plaza francesa de Aire sur l’Adour. Concluida la novillada picada, diversas comisiones quisieron ver el sobrero del festejo y así unas quinientos aficionados pudieron ver no sólo las hechuras sino también la condición del utrero. Fue lidiado por el pamplonés Bruno Martínez, que convenció a todos.Vestido de corto, supo aprovechar el magnífico pitón derecho del novillo. Ejecutó muchas tandas por ese pitón, con seguridad y temple. Y lo mató de una estupenda estocada hasta el puño, fiel reflejo de la evolución de este novillero navarro.
En la novillada picada, interesante resultó el conjunto de Palha. De menos a más, hasta acabar con un sexto que fue premiado con la vuelta al ruedo y con el que Pepe Luis Cirugeda paseó el único trofeo de la tarde. Este sexto, llamado Sardinero, bien cuajado, tuvo una clase extraordinaria. Recibió tres puyazos excelentes en todo lo alto por parte del picador Adrián Majada. Pepe Luis Cirujeda le cortó una oreja tras aviso, tras una faena en la que no logró estar a la altura del animal.
Su primero se lesionó tras rematar contra el burladero y nada más pudo hacer. Respecto a sus compañeros de cartel, Eduardo Neira, que sustituyó a Mariscal Ruiz, saldó sus dos trasteos con el silencio del público y Nino Julián dio la vuelta al ruedo tras estoquear a cada uno de su lote.