Le cortó las dos orejas al único que lidió, un ejemplar de Samuel Flores.
El rejoneador navarro Roberto Armendáriz corroboró el jueves pasado la estupenda temporada que está realizando y lo hizo en la plaza conquense de Honrubia, donde le cortó las dos orejas al único astado que lidió. Bajo una entrada de tres cuartos de plaza, hizo el paseíllo con el también rejoneador Óscar Mota, que cortó una oreja, y con los matadores de toros Víctor Puerto, que paseó tres, y Rafael de Julia, que consiguió una.
Se lidiaron dos utreros para rejones de Samuel Flores, que resultaron colaboradores, manejables, y cuatro toros para lidia ordinaria de Jaralta, desiguales de presentación y de juego.
Al caballero de Noain le correspondió el que abrió plaza, un utrero de Flores al que le realizó una gran faena, sin tiempos muertos, cimentada en el toreo de costado y las piruetas de Delirio y en la valentía de Cristal, que le permitió a su dueño lucirse con tres cortas consecutivas, adornarse y terminar con un rejonazo en lo alto, de efectos fulminantes, que posibilitó la concesión del doble trofeo.