Salió a hombros en la plaza de El Herrumblar junto a los matadores de toros Sánchez Vara y Juan Belda.
Ganado: Seis toros de Los Ronceles, primero y cuarto para rejones, bien presentados y de buen juego en conjunto.
Toreros: Roberto Armendáriz: dos orejas y dos orejas y rabo. Sánchez Vara: cuatro orejas. Juan Belda: dos orejas y rabo y oreja.
Lugar y fecha: plaza de toros de El Herrumblar (Cuenca). 3 de agosto.
Incidencias: tres cuartos de plaza. Los tres actuantes salieron a hombros.
El rejoneador Roberto Armendáriz consiguió el sábado pasado el segundo rabo de su temporada y lo hizo en la plaza conquense de El Herrumblar, donde se enfrentó a dos buenos toros de Los Ronceles.
Recibió al que abrió plaza con El Cañito, montura con la que castigó al cuatreño con un rejón. En banderillas, conquistó los tendidos con Grano de Oro, en dos palos en los que se lució con su elegante toreo de costado, y con Zamorino, que hizo vibrar en cortas distancias ofreciendo la cara al toro. Para el tercio final, montó a Cristal, con el que clavó tres cortas sin respiro y mató de un rejonazo. Hubo fuerte petición de rabo pero el palco sólo concedió las dos orejas del toro.
Pese a tener la p uerta grande asegurada, el caballero de Noain salió a por más frente al cuarto, otro buen toro. Calidad que ya calibró de salida sobre Prometido, con el que dejó un rejón y conectó con sus precisas batidas. En banderillas, optó por utilizar sólo a Delirio, un caballo que conquistó la plaza toreando de costado en dos vueltas completas al ruedo y con sus ceñidas y vibrantes piruetas. De nuevo, para el tercio final, eligió a Cristal, con el que puso los tendidos al rojo vivo con la sucesión de cortas, un espectacular par a dos manos y un rejonazo de efectos fulminantes, que hizo innecesaria la puntilla. Esta vez, sí, la presidencia concedió los máximos trofeos. Y de este modo, Armendáriz completó una tarde tan triunfal como de caro toreo a caballo.