El diestro sevillano no pudo recoger la VIII Pocha de Oro al triunfador del ciclo porque toreó ayer en Venezuela.
Aprovechando la festividad de San Sebastián, Sangüesa celebró el sábado pasado, en su Casa de Cultura, la entrega de premios de la feria taurina, acto que se desarrolló en una sala llena de aficionados. El diestro sevillano Esaú Fernández no pudo recoger la VIII Pocha de Oro porque toreó ayer en Venezuela. Fue un amigo del torero, Pablo García, quien lo representó y quien recibió el preciado trofeo de manos del alcalde de la localidad, Ángel Navallas.
Fernández se hizo acreedor de este reconocimiento por las faenas que ejecutó el 16 de septiembre frente a los toros tercero, un cinqueño negro llamado Sevillano, herrado con el guarismo 25, y ante al sexto, otro cinqueño colorado llamado Desenvuelto, marcado con el guarismo 6, ambos de Ángel Luis Peña, a los que les cortó dos orejas y una oreja, respectivamente.
Por su parte, el ganadero madrileño Ángel Luis Peña, recogió el trofeo del Club Taurino de Sangüesa al mejor astado de la feria, galardón que recibió de manos del presidente de la citada entidad taurina, Patxi Gómez. Peña mereció esta distinción por el toro cuatreño llamado también Desenvuelto, colorado, ojo de perdiz, número 32, lidiado ese mismo 16 de septiembre, en primer lugar, por el diestro Oliva Soto, quien, tras matarlo, dio la vuelta al ruedo.