La ganadería El Sierro, con cuatro toros despuntados para rejoens, ha protagonizado el segundo encierro de Peralta con reses para lidiar por la tarde.
El encierro de esta mañana ha estado marcado por el peligro que ha provocado una de los toros al descolgarse de la manada a la altura de la plaza del ayuntamiento. Hasta este punto, los cuatro toros habían galopado juntos. Pero en ese punto, uno de los ejemplares ha perdido las manos y se ha quedado rezagado, circcunstancia que ha conllevado que se viesen bonitas carreras en solitario ante este último toro.