El novillo vuelve al recorrido del que había escapado tras romper la puerta que tiene bajo sus patas. Fotografía: Íñigo Yanguas.
Salió de la zona acotada y a punto estuvo de entrar en la Plaza de los Fueros, donde se encontraban decenas de personas.
Los festejos taurinos de las fiestas de Arguedas no dejan de generar sobresaltos. Si el lunes una vaca se escapó del Encierro del Estrecho trepando por el monte, ayer fue un novillo el que dio el susto de la tarde al romper una puerta y salir de la zona acotada en la calle Real. La res, de la ganadería local de Alfredo Íñiguez, llegó a entrar en el pasaje que da acceso a la Plaza de los Fueros, lugar donde había decenas de personas en las terrazas de los bares allí situados.
Una vez dentro del pasaje, el novillo embistió a una mujer, produciéndole una herida en la cabeza que requirió 7 puntos; y golpeó a un carro de venta ambulante tras el que se protegió su dueño.
Citado por varios mozos, el astado regresó a la calle Real. Tras unos 7 minutos de incertidumbre en los que la res hizo ademán de escapar, los esfuerzos de varios mozos, un pastor y el jefe de lidia consiguieron reconducir al astado hasta el recorrido y, después, a los corrales ubicados en la plaza. Allí, la res hirió a otro mozo en la cara.
Pero los sustos de la tarde no quedaron ahí, ya que antes, en el conocido como encierro de la Concha, un hombre de 67 años fue arrollado por la manada produciéndose un traumatismo craneoencefálico por el que fue trasladado al hospital de Tudela.
Información de Diego Carasusán para Diario de Navarra.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX