A lomos de ‘Extraño’, Guillermo Hermoso de Mendoza se dispone a clavar una banderilla en la plaza de Pozoblanco.
En septiembre, el caballero navarro ha toreado ocho tardes y ha salido a hombros en siete ocasiones, la última, ayer en Pozoblanco. Reportaje fotográfico: pablohermoso.net
Ganado: Seis toros de La Castilleja, correctos de presentación y manejables respecto al juego en conjunto.
Rejoneadores: Leonardo Hernández (silencio y oreja), Lea Vicens (ovación y oreja) y Guillermo Hermoso de Mendoza (oreja en ambos).
Lugar y fecha: Plaza de toros de Pozoblanco (Córdoba).25 de septiembre de 2022.
Incidencias: Dos tercios de plaza. Tarde agradable. Segundo y último festejo de la Feria de las Mercedes. El rejoneador navarro salió a hombros.
Pozoblanco supuso ayer para Guillermo Hermoso de Mendoza el cierre de la temporada europea 2022, la más extensa y por supuesto la más exitosa de las realizadas en su todavía joven e incipiente carrera. Un año que pudo cerrar con triunfo y con una nueva puerta grande que añadir a su triunfal temporada, Puerta del Gallo en este caso.
No lo tuvo fácil en su presentación en el coso cordobés Guillermo, ya que le tocó enfrentar a un astado muy áspero de comportamiento, muy frío en toda la lidia y al que había que llegarle mucho para arrancarle la embestida. Faena muy elaborada que terminó con tres cortas con Esencial, ante un toro ya muy aquerenciado y pegado a tablas. Un rejonazo final mortal de necesidad fue el principal argumento, junto con la entrega de Guillermo y su cuadra, para cortar la primera oreja de la tarde.
El sexto y último de la temporada fue un toro noble y que ayudó al triunfo del jinete y eso que no tuvo una salida esperanzadora, si bien diremos que es muy típica del encaste murubeño. La sorpresa en este trasteo vino en banderillas de la mano de un caballo no habitual en este tercio. Martincho fue la sorpresa y el caballo no extrañó el tercio. Se fue con verticalidad hacia el toro, como lo hace de salida y dejó dos banderillas plenas de vibración y de riesgo.
Culminó la faena por la línea de la calidad, con dos buenas y frontales rosas a lomos de Esencial, que esta vez sí tuvo toro para lucir y para marcar un gran par a dos manos, marcando los tiempos con el pecho y saliendo torero de la suerte. Intentó matar de frente para poner un perfecto colofón a la faena y a la temporada, pero el toro no se le arrancó lo necesario y pinchó. Cuando al final enterró el rejón de muerte y el toro dobló, la plaza se tiñó de color blanco para solicitar para Guillermo la oreja que la abría la puerta grande y le convertía en el máximo triunfador del festejo.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX