Los toros de Adolfo Martín, debutantes en las calles tafallesas, han galopado hermanados, salvo uno, y no han dejado herido alguno.
El primer encierro de las fiestas de Tafalla, que comenzaron ayer, domingo, con el cohete anunciador de siete días festivos, ha sido multitudinario y se ha saldado sin heridos y sin tener atenciones sanitarias, según los datos facilitados por el puesto de enfermería de la Cruz Roja.
Esta entidad no ha tenido que atender a personas en ninguno de los cinco puestos fijos que tiene instalados a lo largo del recorrido, ubicados en la plaza de Navarra, la curva de la farola, las avenidas de Sangüesa y Ujué y la enfermería de la plaza de toros.
Los toros de Adolfo Martín, que han protagonizado su primer encierro en Tafalla, han galopado rápido y hermanados, salvo un ejemplar. Este toro rezagado durante el recorrido ha sido el causante que la primera carrera se prolongara hasta alcanzar casi los dos minutos de duración.