El primero, de Toros de Cortés, cogió espectacularmente e hirió a El Juli. Fotografía: Arjona.
El primero le asestó a El Juli una cornada de unos 30 centímetros en el muslo derecho “que roza la safena”.
La corrida de toros de Victoriano del Rio estuvo bien presentada y resultó noble y manejable, con dos mansas excepciones. El primero, de Toros de Cortés, que hirió a El Juli, fue manso durante toda la lidia. El segundo, anunciado como tercero, del hierro titular, ya como los restantes, fue noble aunque le faltó transmisión. El sobrero tercero, muy armado y con presencia, fue un manso que se quiso ir siempre a tablas. El cuarto, muy bien presentado, tuvo nobleza a raudales, embistió muy lento y fue aplaudido en el arrastre. El quinto fue un toro de mucha vibración y muy exigente; tuvo la cualidad de embestir muy humillado y la dificultad de su repetición. El sexto se movió, fue noble y sirvió en la muleta.
Respecto a los diestros, éste fue su resultado: El Juli (herido), José María Manzanares (silencio, ovación y oreja con petición de la segunda) y Antonio Nazaré (ovación, dos orejas y ovación). Entrada: Lleno de “no hay billetes”. Se desmonteraron en el quinto Juan José Trujillo y Luis Blázquez.
El diestro madrileño sufrió una cornada “extensa en la zona del cuádriceps del muslo derecho que roza la safena” y fue trasladado en ambulancia a la clínica Sagrado Corazón de la capital hispalense para ser operado, según informaron fuentes médicas.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX