Nabil ‘El Moro’ pasea en triunfo una oreja en la plaza de Vinaroz.
Ha realizado este año catorce paseíllos y ha conseguido cinco salidas a hombros, dos de ellas en Navarra. Galería fotográfica.
El novillero Nabil ‘El Moro’ cortó una oreja el pasado domingo en la plaza castellonense de Vinaroz, en la que intervino dentro del certamen conmemorativo del vigésimo quinto aniversario de la Escuela Taurina de Castellón, y cerró así su temporada. Lidió el segundo de la mañana, un eral de Los Maños, bajo, de bonitas hechuras, que embistió con nobleza y transmitió. Al joven pamplonés, sólo un pinchazo le alejó de cobrar el doble trofeo.
Lo recibió de capa con buen estilo y así lo fue sacando a los medios. Con la muleta, lo toreó por ambos pitones, muy templado, se sintió a gusto y gustó a la concurrencia. En la suerte suprema, tras un pinchazo, dejó una estocada de la que el novillo rodó sin puntilla. Ese pinchazo le alejó del segundo trofeo y el navarro se tuvo que conformar con el corte de una oreja.
El novillero pamplonés alternó por orden de lidia con el alicantino Kevin Alcolado (oreja), el castellonense El Ceci (oreja), el oscense José Mallén (ovación), Aarón Rull (vuelta al ruedo) y Abel Rodríguez (ovación), estos dos últimos también de Castellón.
Finalmente, los trofeos al mejor novillero y a la mejor ganadería fueron a parar a Ian Bermejo, de Castellón, por la faena que realizó el sábado a un novillo de El Añadío, y a la ganadería Pablo Mayoral, que, también el sábado, lidió tres erales, como las demás.
Nabil cerró así una intensa temporada, en la que ha sumado catorce actuaciones, ha cortado 17 orejas y ha salido a hombros en cinco ocasiones, dos de ellas en Navarra, en las plazas de Estella y de Sangüesa.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX