Los astados de Tomás Prieto de la Cal completaron la carrera en 3 minutos y 51 segundos y dejaron un balance de seis heridos. Galería fotográfica.
Tres minutos antes de las ocho de la mañana un cohete anunciaba la salida de los toros de la ganadería Tomás Prieto de la Cal. Los 700 metros que conforman el recorrido de Tafalla volvieron a recibir a estos astados de Huelva que completaron la carrera en 3 minutos y 51 segundos en el primer encierro de las fiestas.
La manada se separó desde el primer momento. “Dos toros estaban al final del corral. Mi compañero, al intentar agrupar la manada para prepararla para salir, ha tenido algún problema con el resto de los toros”, explicó Alberto Pérez Garayoa, jefe de pastores.
Así, cuatro toros corrieron por delante, y los dos que tardaron en salir lo hicieron cuando los primeros llegaban ya a la plaza. “No han seguido al resto de sus compañeros y se han quedado sin una referencia”. Pérez se mostraba aliviado, ya que los dos últimos toros llegaron a la plaza “con una rapidez pasmosa, pero sin dar grandes problemas”, más allá de algún momento de tensión. Contó que el ritmo de los astados fue bueno y permitió ver carreras bonitas.
En la Avenida Severino Fernández, dos mozos sufrieron espectaculares revolcones. Uno de ellos, Pablo Solchaga Amatriain, vecino de Tafalla de 21 años, fue levantado por los aires por uno de los toros del primer grupo. Acabó por los suelos, tendido boca abajo y sin moverse. A pesar del susto, sólo tuvo contusiones múltiples.
El otro revolcón llegó con los segundos toros. Un astado negro levantó a un mozo que, al caer y girarse, vio que detrás venía el otro toro. Logró esquivarlo lanzándose en plancha.
El jefe de los pastores aseguró que vio “a unos astados con fuerza, que no se cansaban de correr a pesar de quedarse lejos del resto de la manada”. Además, contaba que hubo corredores que prefirieron no quemar zapatilla ayer. “Hay cierta psicosis con esta ganadería, ya que en 2011 murió en Lodosa un hombre corneado por un novillo de los Tomás Prieto de la Cal”.
Quienes no se quedaron en casa fueron Sergio Also Fernández y Antonio Rica Rica, madrileños de 31 años que corrían por primera vez en Tafalla. “Cuando he visto pasar los cuatro primeros toros y he escuchado el segundo cohete, he pensado que ya estaban todos los astados en la plaza. Pero otros corredores me han dicho que faltaban otros dos toros”.
Ningún traslado
A pesar de que en un primer momento corrió la voz de que un joven había sido corneado, el balance final entregó buenas noticias. No hubo traslados. Además del citado vecino de Tafalla, J.C., pamplonés de 22 años, fue atendido en la curva de la farola por heridas en las rodillas. También tuvo que ser atendido otro pamplonés de 36 años que sufrió una contusión en el cuello. El guipuzcoano P.D.J., de 35 años, recibió atención de los voluntarios de la Cruz Roja por unas erosiones en el brazo izquierdo.
En la estación, P.B.C., de 35 años y de San Sebastián, fue atendido por una contusión en la pierna izquierda. Ya en la plaza de toros, J.A.M., de 53 años y de Villafranca, fue atendido por una contusión molar provocada por una caída.
Información de Izania Ollo para Diario de Navarra. Fotografías: Jesús Caso, Jesús Garzaron, Alberto Galdona y José Carlos Cordovilla.