LA GANADERÍA CONDE DE LA MAZA PONE FIN A SU DILATADA HISTORIA

Toros de Conde de la Maza en los Corrales del Gas en junio de 2015.

Toros de Conde de la Maza en los Corrales del Gas en junio de 2015.

El propietario, que ha lidiado tres corridas de toros en Pamplona, asegura que “podría dar muchas explicaciones, pero no lo voy hacer, dejémoslo ahí”.

La ganadería Conde de la Maza ha ido al matadero en su totalidad. Leopoldo Sáinz de la Maza, ganadero de la divisa andaluza, ha declarado a Mundotoro, que “podría dar muchas explicaciones, para escribir un libro, pero no lo voy a hacer, dejémoslo ahí’.

Según el citado portal taurino, en el proceso de disolución de la ganadería, se han soltado toros a las calles y el resto se han llevado a sacrificar. “Se fue al matadero y ya está, como tantas otras, no hay más”, concluyó el responsable de la hasta ahora divisa de Morón de la Frontera.

De Conde de la Maza se han lidiado tres corridas de toros en Pamplona. La primera, el 13 de julio de 1981. Los toros, bien presentados y bonitos de hechuras, se dejaron torear. Emilio Muñoz le cortó una oreja al quinto; Ruiz Miguel y Espartaco se fueron de vacío.

Doce años después, regresó a la capital navarra. Fue una corrida de toros que lidió el 25 de septiembre de 1993, con motivo de la festividad de San Fermín Chiquito. Los toros, aunque desiguales, estuvieron bien presentados pero resultaron mansos y deslucidos. Miguel Rodríguez, que debutó en Pamplona, le cortó al que abrió plaza la única oreja de la tarde. Paquiro, que tuvo una tarde aciaga y recibió los tres avisos en el quinto, y Domingo Valderrama se fueron de vacío.

El 12 de julio de 2015 se lidió el tercer y último encierro de Conde de la Maza. Fue un encierro bien presentado, serio de cara, cinqueño, pero manso, deslucido, descastado, sin clase alguna y varios con peligro. Eugenio de Mora le cortó al primero la única oreja del festejo. Nazaré y Del Álamo recibieron el silencio del público.

Además de estas tres corridas, toros de Conde de la Maza se lidiaron en Pamplona también sueltos, para remendar encierros. Así sucedió en 1970, 1972, 1983 y 1985, ferias que elevan hasta 25 el número de toros de este hierro lidiados en la capital de Navarra.

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