Javier Antón pasea triunfal un rabo simbólico en la plaza venezolana de Valle de la Pascua.
El matador de toros navarro le cortó, además, las dos orejas al segundo de su lote en la plaza venezolana de Valle de la Pascua. Galería fotográfica.
Javier Antón hizo ayer historia. Por un lado, consiguió presentarse en América. Lo hizo en la plaza venezolana de Valle de la Pascua, que se llenó en la mitad de su aforo. Por otro, y pese a las pocas ocasiones que se le presentan, no desaprovechó la oportunidad e indultó al segundo toro del festejo, al bravo Pascuense, número 94. No conforme con este triunfo, le cortó las dos orejas al segundo de su lote. De este modo, el balance de su actuación fue: dos orejas y rabo, simbólicos, y dos orejas.
El matador de toros navarro alternó con el diestro Rubén Darío (oreja y silencio) y el rejoneador Francisco Javier Rodríguez (dos orejas), con el que compartió la salida a hombros.
Se lidiaron cinco toros de Juan Campolargo, que ofrecieron muy buen juego, salvo el segundo del lote de Darío, que resultó complicado.
Antón realizó a los dos de su lote dos grandes faenas, variadas y templadas, trasteos que le permitieron expresarse artísticamente. Además, anduvo contundente con la espada; acabó con su segundo de un estoconazo, lo que le permitió sumar otras dos orejas a su cuenta.
“Estoy muy contento, tanto por este triunfo –yo no había indultado antes- y como por el cariño con que me han recibido las gentes. Es posible que esta actuación me sirva para nuevas tardes en este país y me gustaría que sirviese para algo en mi temporada española”, ha declarado el torero navarro de Murdante.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX