El caballero navarro firmó su mejor tarde por el momento, tanto que desorejó a los de su lote.
Ganado: Dos toros de Bernaldo de Quirós, primero y cuarto, con transmisión y complicaciones, y cuatro de Puerta Grande.
Rejoneadores: Pablo Hermoso de Mendoza (dos orejas y dos orejas y rabo), Horacio Casas (silencio y oreja) y Luís Pimentel (oreja en ambos).
Lugar y fecha: Plaza La Concordia de Orizaba, estado de Veracruz (México). 18 de febrero.
Incidencias: Media plaza. Actuaron los Forcados Hidalguentes y de Querétaro. Pimentel y el caballero navarro salieron a hombros.
En la víspera de su actuación en la Plaza México, Pablo Hermoso de Mendoza rubricó en Orizaba su mejor actuación, por el momento, de su campaña mexicana, compromiso que saldó con el corte nada menos que de cuatro orejas y un rabo. Y, de cara a supersticiones, este triunfo llegó en su decimotercera actuación de este año en América y también la decimotercera en esta plaza veracruzana, llamada La Concordia.
La puerta grande la aseguró con el primero, que tuvo transmisión y planteó complicaciones en los embroques, porque cortó mucho la embestida. Fue una faena a más, comenzada con Funcal de salida, continuada con Januca y Donatelli en banderillas, y finalizada con D’Artagnan, con el que dejó tres cortas a un toro ya muy parado y un rejonazo espectacular, en todo lo alto, del que rodó el toro sin puntilla.
Redondeó la tarde cortando los máximos trofeos del cuarto, más complicado que el anterior, según fuentes cercanas al jinete estellés. Frente a ese toro, el maestro tiró de templanza y oficio, cualidades que le permitieron pasear el cuarto rabo logrado en este escenario, tras una faena en la que hizo diabluras con Disparate.