El joven rejoneador navarro mereció salir a hombros pero el palco le negó la segunda oreja del cuarto. Fotografías, pablohermoso.net
Ganado: Dos toros de Romao Tenorio para rejones, primero y cuarto, nobles aunque de juego desigual, tres de Domingo Hernández, bien presentados y de buen juego, y uno de Núñez del Cuvillo, de distinta presentación y juego.
Toreros: Guillermo Hermoso de Mendoza (silencio y oreja), Morante de la Puebla (oreja y saludos desde el tercio) y Alejandro Talavante (oreja y dos orejas).
Lugar y fecha: Plaza de toros de Almería. 23 de agosto de 2024.
Incidencias: Media plaza. Tarde de calor agobiante. Talavante salió a hombros.
En un duro fin de semana de calor en toda España, Almería no se libró de estas altas temperaturas y rozó los 40 grados en una tarde de toros con ambiente y un cartel muy rematado. Guillermo regresaba a esta preciosa plaza después De haberlo hecho como ‘novillero’, y ahora convertido en rejoneador de alternativa.
Su primer toro fue noble y colaborador aunque muy justo de fuerzas. Guillermo lo lidió en virtud a sus condiciones en una lidia plena de suavidad y despaciosidad y dejándolo con un solo rejón de castigo. Estuvo animoso en una lidia de menos a más. Le faltó atemperar la embestida de este oponente con las distintas cabalgaduras, como Jerez o Justiciero. En banderillas estuvo eficiente en su labor. Tras tres rejones, acertó en el cuarto. Se silenció su labor.
En el cuarto, tras la merienda, salió con ganas de tocar pelo, pleno de ganas para que no se le fuera en blanco una tarde en la que el público almeriense siempre estuvo con él y por ello, se merecía lo mejor del joven centauro. El navarro realizó una faena de destreza y de una perfecta colocación de las banderillas en las monturas de Ecuador y Extraño. Rejón y descabello.
Fue una faena de altos vuelos que cerró Justiciero con dos rosas y un par a dos manos, todo por los adentros y por terrenos muy apretados. Un rejón arriba hasta la bola necesitó de un certero descabello para que los pañuelos se destaran en el tendido solicitando el doble trofeo. La presidencia negó el segundo a pesar de la abrumadora mayoría de petición, ganándose así la sonora bronca del respetable, pero evitando también la más que merecida salida a hombros del torero a caballo. En cualquier caso, paseó una oreja después de realizar una labor importante.
Por su parte, Alejandro Talavante salió por la puerta grande en el cierre de la Feria de la Virgen del Mar de Almería. El diestro extremeño mostró una gran dimensión durante toda la tarde, cuajando a sus dos oponentes. Desorejó al sexto de la tarde, en una faena llena de inspiración, y cortó una oreja con petición de la segunda al tercero tras una actuación llena de entrega y compromiso.
Por último, Morante de la Puebla toreó con gusto al segundo de la tarde, cortándole una oreja, y perdió la puerta grande tras fallar con la espada ante el quinto.