En una charla celebrada en el Club Taurino de Pamplona, el diestro de Espartinas rememoró las tardes más importantes de este año. Reportaje fotográfico.
El torero sevillano Borja Jiménez ofreció ayer una charla en el Club Taurino de Pamplona, que se llenó para la ocasión, en un acto titulado ‘El torero de la temporada’, y en el que el diestro rememoró su paso por la plaza de Pamplona. En el coloquio se puso en valor la importante campaña del espada de Espartinas, con una tarde, la del 7 de julio, en la que se erigió como héroe del toreo, tras ser herido de gravedad por un toro de La Palmosilla, y cortarle las dos orejas.
A la hora de entrar a matar, Borja Jiménez resultó herido por el toro del hierro gaditano, que le infirió una cornada de pronóstico grave en el muslo derecho, algo que recordó el propio Jiménez: “Más allá del percance, me quedo con el toreo, con la firma con la que pude sentir a la afición de Pamplona y con los muletazos que le dejé especialmente a ese sexto toro de La Palmosilla. Las cornadas forman parte de esta profesión y es un peaje por el que hay que pasar, pero lo importante es superarlas y seguir adelante más fuerte”, expresó el sevillano.
Todo ello ocurrió tras una faena de máxima apuesta, que comenzó de rodillas y en la que selló media docena de tandas de toreo reposado por ambos lados, lo que junto con la estocada final, en la que recibió la cornada, le valieron las dos orejas.
En el acto, que puso fin a un ciclo de charlas del Club Taurino de Pamplona, Jiménez rememoró también otros momentos de suma importancia en el último año y medio, pasando por sus tardes de la Copa Chenel, por las tres orejas que cortó el 8 de octubre de 2023 a la corrida de Victorino en Las Ventas o la tarde en la que resultó triunfador de San Isidro: “Sentir rugir a Madrid es algo que no se cambia por nada en el mundo; te sientes el hombre más feliz de la tierra”, indicó el sevillano.
Asimismo, analizó otras tardes de suma importancia esta temporada como las de Sevilla –una plaza en la que cortó dos orejas y realizó hasta cuatro faenas de mucha importancia-, las tres orejas en Bilbao, el doble triunfo de Salamanca…
Su presentación en Pamplona
En 2023, Pamplona apostó por anunciar su nombre, cuando pocas plazas lo hacían, y la moneda cayó de su lado, dentro de una tarde marcada por la dureza. Fuel el 8 de julio, con toros de José Escolar. Jiménez recordó las dos portagayolas con las que recibió a sus oponentes, que calaron profundamente en la afición navarra. Y recordó cómo, en la primera de ellas, pasó un quinario porque debió esperar una barbaridad en la puerta de chiqueros. Luego, le pasó por encima en el saludo de rodillas.
Se ha puesto en valor que la tarde también tuvo otros puntos emotivos, como el brindis al alcalde de sol del cuarto toro; con ese animal, se puso de verdad con la mano derecha y le robó series rotundas por ese lado teniendo en cuenta lo que tenía delante. Y con el quinto, al que tuvo que lidiar por la sangre de su compañero Robleño, logró series meritorias con paciencia y tragando mucho, dando una clamorosa vuelta al ruedo.
Además, aquel día de 2023 en Pamplona prologó su contundente final de temporada, ya que una semana más tarde hizo el paseíllo en Las Ventas para lidiar una corrida de Margé, compromiso que saldó con una aclamada vuelta al ruedo, y que le sirvió para entrar en el cartel de la corrida de Victorino Martín en la Feria de Otoño, donde protagonizó una tarde redonda y firmó un triunfo rotundo de tres orejas.