ARMENDÁRIZ CORTA UNA OREJA DE PESO Y SE REIVINDICA EN LAS VENTAS

Roberto Armendáriz triunfó y convenció en la plaza de Las Ventas.

El caballero de Noain destacó dejando banderillas con ajustados quiebros de frente, sobre todo montando a ‘Farruco’, y alcanzó el momento álgido de su labor al quitar la cabezada a ‘Rubí’. Fotografías: Plaza 1.

Ganado: Seis toros de Benítez Cubero, que dieron un juego más que limitado, con escasa durabilidad, quedándose parados de salida. La excepción fue el primero y el sexto; éste fue el mejor del encierro y el mejor presentado.

Rejoneadores: Emiliano Gamero (saludos), Paco Velasquez (vuelta tras petición), José Miguel Callejón (saludos), Roberto Armendáriz (oreja), Iván Magro (vuelta tras petición) y Andrés Romero (oreja).

Lugar y fecha: plaza de Las Ventas, en Madrid. 20 de agosto de 2023.

Incidencias: Un cuarto de plaza. Entrada, 5,234 espectadores. Callejón sustituyó a Óscar Borjas. Emiliano Gamero y Paco Velásquez confirmaron sus alternativas con los toros Valiente, número 19, de 506 kilos, y Llevador, número 21, de 512 kilos, respectivamente.

Según Pablo García, en Burladero TV, al rejoneo hay que darle el sitio que merece, está claro, pero no hagamos quejas de ver siempre los mismos nombres en los carteles si después sólo vamos a la plaza a ver las mismas faenas. No se molesten por estas palabras, sólo quiero hacer reflexionar por lo que aconteció en el ruedo de Las Ventas. Hubo hambre, entrega y diversidad. Pero para triunfar, hay que tener oportunidades. Que cada cual lo entienda a su manera.

En este contexto, el cuarto de la tarde fue para Roberto Armendáriz, una figura que fue a Madrid a torear, a nada más. Elevó el transcurso de la tarde realizando una faena cercana, metido en los terrenos del animal, exponiendo…, pero lo más importante fue su conocimiento hacia el astado. Un toro de corto recorrido, berrendo en negro, al que supo cuidar para tener faena. Un baile, una batalla es cosa de dos. Y, si no hay oponente, todo se desluce. Por eso es importante conocer a quien tienes delante y saber tratarlo para que haya una armonía. Y esa pudo ser la mayor lección que dejó el navarro sobre el ruedo, además de cortar una oreja.

El caballero de Noain destacó dejando banderillas con ajustados quiebros de frente, sobre todo montando a Farruco, y alcanzó el momento álgido de su labor al quitar la cabezada a Rubí. Dejó entero el rejón de muerte y paseó el trofeo.