Muchos corredores se dieron cita en el primer emcierro.
Lo protagonizaron un utrero, un cuatreño y un cinqueño de Urcola en apenas un minuto.
Muchos fueron los corredores que ayer quisieron acercarse hasta Sangüesa para participar en el que era el primer encierro de las fiestas. Una carrera que los astados de la ganadería cacereña de Urcola completaron a toda velocidad, en apenas un minuto.
Como curiosidad, estaba previsto que participaran los cuatro toros que por la tarde serían lidiados en la corrida de rejones, pero sólo lo hicieron tres, pues el cuarto se partió un pitón en el desencajonamiento y fue devuelto al ganadero.
Ante este hecho, se trajo un nuevo toro a Sangüesa para completar el cuarteto, pero al ser de otra ganadería se optó por no mezclarlo con los otros tres, los que finalmente corrieron el encierro.
“Ha sido una carrera muy rápida, y los toros iban desde el principio buscando de lado a lado”, destacó el portavoz de los pastores, Juan Carlos Oiza. Cruz Roja, con voluntarios de Sangüesa y Tafalla, no practicó atenciones entre los corredores.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX