Fernando Pizarro y José Mai Marco en 2012.
“Es una corrida del tipo que solemos llevar a Pamplona, con cara y trapío. Aunque no distinguen ya mucho las dos procedencias originarias de la ganadería, porque está todo bien mezclado, hay unos que, por pitones y hechuras, tiran un poquito más a Atanasio y otros que lo hacen más a Conde de la Corte. Entre los preparados, hay dos cinqueños; uno de ellos, el 16, es muy atanasio, y el otro, el 21, es más condeso. Luego el 31 también tira más a atanasio y el 27, que junto el 33 y el 34, está de reserva, tiene curiosamente cara del conde y cuerpo de atanasio. Este año recogemos el premio a la mejor corrida del año pasado. Esperemos que alguno rompa después en la plaza”.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX