Javier Núñez recogió este año el trofeo Carriquiri al toro más bravo de 2019. En la imagen, aparece en el centro rodeado de familiares y representantes de la Meca.
El propietario de La Palmosilla destaca el segundo toro de Manuel Escribano –‘Pueblerino’, número 20, negro, de 530 kilos-, lidiado este año en la capital navarra.
La Palmosilla fue la ganadería triunfadora de la Feria de San Fermín de 2022. Una temporada que ha corroborado el buen camino tomado por Javier Núñez y que ya se vio en 2019, año que supuso superar una etapa complicada. Y aunque la pandemia frenó ese ascenso, supuso un volver a empezar, pero la gran regularidad de las corridas lidiadas y sus éxitos notables en plazas de importancia como Pamplona, Madrid o Valencia han vuelto a poner en boca del aficionado al hierro gaditano.
El ganadero asegura que existen dos tipos de toros en su ganadería, “el que se define de salida y otro cuya entrega es directamente proporcional a la entrega que tenga el torero, es decir, el toro que exige al torero para sacar su fondo. En general tiene una gran profundidad y embiste mejor cuanto más se aprieta el torero con él y que va a más, tanto en el recorrido, en la largura del viaje, como en los muletazos durante la tanda, es decir, que cada embestida sea mejor que la última”. Un ejemplo: el segundo toro de Manuel Escribano en Pamplona.
Fue éste un gran toro dentro de una completa corrida que le valió el Trofeo Feria del Toro a la divisa triunfadora de los Sanfermines. Un éxito que ha marcado la temporada. “Ha sido importante en todo. Les estoy muy agradecido por la oportunidad de lidiar en 2019, por mantenernos la palabra tras la pandemia y lidiar en esta feria, por el respeto y la categoría con que nos han tratado. Y como es de bien nacido ser agradecido, nuestra prioridad es Pamplona, por eso ya está apartada la corrida del año que viene. Es una feria en la que todos queremos estar, de ahí que sea tan difícil entrar y su repercusión es mundial”, reconoce en una entrevista publicada en Aplausos.es, para los abonados. Tanto Pamplona como Azpeitia respetaron los contratos con La Palmosilla suspendidos por la pandemia en 2020, “a diferencia de otras empresas”, denuncia. Dos plazas a las que regresará el próximo curso por méritos propios.
El gran momento por el que atraviesa La Palmosilla es evidente. De hecho, en 2023 no podrá atender todas las peticiones que ya tiene. “Nos movemos en los mismos números que este 2022, entre siete u ocho corridas de toros, tengo 60 toros preparados. Asumiremos nuevos retos y esperamos estar a la altura”. Entre esos retos podría encontrarse Las Ventas después del gran sabor de boca que dejó “Brasero”, el toro que se llevó la corrida concurso de ganaderías que tenía “tintes toristas”. Regresará con seguridad a Pamplona y Azpeitia, y “hay mucho interés en Nimes y Dax. Estoy muy ilusionado con que cuenten con nosotros en Francia”, concluye.
La de 2022, una temporada estupenda
La Palmosilla ha lidiado en 2022 siete corridas de toros completas. En total han sido 52 toros, contando los animales sueltos, además de catorce novillos picados y dos novilladas sin caballos.
Ha lidiado corridas muy completas como la de Pamplona, que le valió el trofeo a la triunfadora, y otras que tuvieron gran interés en plazas como Torrejón, Azpeitia, Almagro, Abarán, Arcos…
Sacaron nota los toros de las corridas concurso de Las Ventas o Valencia, plazas de primera. A ello hay que sumar el sobrero en la miurada de Bilbao, que tuvo gran interés y fue lo más destacado de aquella corrida.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX