Según el matador de toros navarro, sólo el uso del descabello le privó de cortar trofeos. Galería de imágenes.
Ganado: Cuatro toros de San Pedro, desiguales aunque de aceptable presentación y juego desigual; buenos, con clase y bravos, el primero y el cuarto, y complicados el segundo y el tercero; este último, todo un prenda.
Toreros: Javier Antón (vuelta en ambos) y Luis López (silencio y dos orejas).
Presidencia (juez de plaza): Daniel Palomino, que pasó desapercibido aunque se mostró generoso en la concesión de la segunda oreja del cuarto.
Lugar y fecha: plaza portátil Yawar Toro, en Puente Piedra, Lima (Perú). 30 de agosto.
Incidencias: Lleno. Tarde soleada. Corrida de toros en honor a la Santísima Virgen de la Asunción y el Niño Jesús Mariscal Chaperito, que celebran los residentes de la Provincia de Oyón en la capital peruana y que fue organizada por la Peña Taurina de Oyón. Luis López, que recibió el premio al triunfador del festejo, sufrió una cogida impresionante por el primero cuando salía del tercio de quites.
Falto de oportunidades en Europa, el matador de toros Javier Antón continúa triunfando en tierras americanas, peruanas en este caso. Tras sus actuaciones en Huambos, se mostró como un torero técnico y con oficio en Puente Piedra, localidad que se engloba en Lima, en la capital peruana.
Vestido de corinto y oro, al colorado que abrió plaza, que tuvo cierta clase, lo toreó en varias series que conectaron con los tendidos, aunque debieron tener más reposo. Mató de una estocada pero tuvo que descabellar; por ahí perdió los trofeos. Pese a ello, dio una merecida vuelta al ruedo.
Según Torosenelmundo.com, ante el tercero, no tuvo posibilidades. El toro estuvo pendiente y mirón con su matador, lo que obligó a tirar de oficio al diestro radicado en Cuenca. No se confíó y alivió sin cruzarse al hilo del pitón por lo complicado del bicho, que iba siempre por arriba. Mató de una estocada trasera y dio otra vuelta al ruedo.
Siguiendo la misma fuente, Luis López, por su parte, no perdió el derecho a quite en el primer toro. Pero al rematarlo, el torero nacional le perdió la cara por varios instantes y el toro se revolvió e hizo por él, levantándolo aparatosamente y dejándolo caer de fea manera y a merced suyo. Salvo por el hecho de haber sido un toro cerrado de pitones y brocho, otro habría sido el desenlace.
Algo resentido por este percance, nada consiguió de su primero. Estuvo mejor con el que cerró tarde, que fue bueno, sobre todo por el pitón derecho. Hubo buenas series de derechazos. Fue cogiendo tono la faena, pero se le notó algo confundido al matador, que hizo un ademán de no sentirse bien, para casi de inmediato caer quedando a merced del toro, aunque sin consecuencias. Tardó en cuadrar al toro para la muerte. Media estocada. Una oreja y, luego de pedirlo la gente, el juez concedió la segunda. Por ello, se llevó el trofeo al triunfador de la tarde.
Según Chicuelo, en Galleoporchicuelinas.blogspot.com, el navarro comenzó la faena ante el primero por doblones. “Por el pitón derecho el morlaco presenta recorrido y lo aprovecha llevándolo a media altura rematando con molinetes de rodillas y pase de pecho. Prueba por el izquierdo con ayudados, y los naturales empiezan a calar en el respetable…; el coletudo muestra sus ganas de lidiar al burel que es repetidor, terminando la faena con manoletinas. Despacha de estocada entera y descabello. Vuelta al ruedo. Tercero en orden de lidia, es un negro listón de pelos de buen tipo, es saludado por verónicas y remate vistoso. Al caballo acude con la cabeza alta estrellándose en el peto, el castigo es largo. Se inicia por doblones, el bicho es complicado que al igual que su antecesor busca lidiador, responde bien por el derecho a media altura, por el izquierdo no presenta mayores posibilidades, el respetable se enfría con un toro complicado, el diestro entiende que hay que lidiar y vuelve al pitón derecho, que nos regala buenas series rematando con molinetes, lamentablemente duraría poco, es desarmado y el bicho empieza a cobrar sentido dándole advertencias al diestro, este entiende la amenaza ya es hora de culminar su tarde. Pasaporta de una estocada entera, y dos descabellos”.