El caballero de Noain clava una rosa al segundo de su lote.
Le cortó tres orejas a un lote de novillos de Roque Jiménez, que ofreció un juego dispar. Reportaje fotográfico, Javi Alonso.
Ganado: Cuatro novillos de Roque Jiménez, de buen juego salvo el complicado primero; tercero y cuarto fueron premiados con la vuelta al ruedo
Toreros: Roberto Armendáriz (dos orejas y oreja) y Jesús de Almería (oreja y dos orejas y rabo).
Lugar y fecha: Plaza portátil en Abrucena, Almería. 19 de mayo, domingo.
Incidencias: Tres cuartos de plaza. Tarde fresca. Segundo festejo de la feria en honor a San José. Los dos actuantes salieron a hombros.
Roberto Armendáriz inició ayer su temporada con magnífico pie, ya que consiguió un triunfo rotundo ante un lote de Roque Jiménez, en la plaza almeriense de Abrucena, donde se celebró un festival en el que toreó mano a mano con el novillero Jesús de Almería, que también firmó un triunfo redondo. Fue la actuación previa a su presentación en Las Ventas, donde confirmará la alternativa el próximo domingo.
En lo referente a la actuación del caballero navarro, la crónica publicada en el ‘Diario de Almería’ es la siguiente: ‘El primer novillo de la tarde, del hierro de Roque Jiménez, fue para el rejoneador navarro Roberto Armendáriz. No se lo puso nada fácil este morlaco desde los inicios. Colocó un rejón de castigo antes de cambiar de caballo para colocar las banderillas largas ante un animal que se desentendió de la pelea. Colocó dos banderillas antes de cambiar nuevamente de equino para ponerle otra banderilla larga. El toro se rajó demasiado pronto ante un jinete con ganas pero que no pudo lucirse ante la poca fuerza del astado. Nuevamente cambió de caballo y con un equino castaño claro le colocó dos rosas al novillo. Tras un pinchazo colocó un rejón de muerte con el que el novillo se echó al suelo, lo que le sirvió para llevarse las dos orejas.
Después de la larga merienda, se reanudó el espectáculo con el segundo novillo para el rejoneador Roberto Armendáriz. Con un caballo negro toldo colocó el primer rejón de castigo y le impuso un segundo también antes de cambiar de caballo para poner las banderillas largas en un tercio que levantó los aplausos del respetable. Cogió a su caballo marrón toldo para colocar otras tres banderillas largas mientras los sones musicales de la Banda de Música de Abrucena acompañaron la faena. Se gustó el jinete navarro ante un novillo de poca transmisión y falto de fuerzas. Le colocó una rosa antes de coger el rejón de muerte. Pinchó a la primera y a la segunda logró solo medio rejón de castigo y algo trasero. Fue premiado con una oreja y vuelta al ruedo del novillo’.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX