Victoriano del Río.
El ganadero de Guadalix de la Sierra se siente esperanzado con el encierro que ha traído a Pamplona y le gusta, especialmente, el 129, Jubilado, un cinqueño negro bragado, de 595 kilos.
Victoriano del Río tiene las cosas claras en relación a la capital navarra. “En Pamplona prima la presentación, que ha de ser impecable. Es la Feria del Toro y allí llevamos siempre los animales más impresionantes de la camada. La de este año es una gran corrida se mire por donde se mire, sobre todo en cuanto a caras, que son espectaculares. Pocas veces se consiguen a la vez los premios al mejor toro y a la mejor corrida y eso nos ocurrió a nosotros el año pasado. Es una satisfacción y un lastre importante al mismo tiempo porque igualarlo ahora va a ser muy difícil”.
Respecto al encierro traído a Pamplona, ha declarado lo siguiente para el semanario Aplausos. “A pesar de todo, de ese lastre, hay toros que me gustan. Hay un hermano de padre de Español, el toro premiado en los últimos sanfermines, y de entre los reseñados me gusta especialmente el 129, del que espero que dé un resultado muy bueno. En realidad, eso espero de casi todos, porque, si no, no los embarcaría. Los toros de Pamplona se eligen solos por sus hechuras, pero dentro de los que tienen trapío para ir a San Fermín, nosotros escogemos los que creemos que más posibilidades tienen de ofrecer un buen espectáculo. Figuras tiene el cartel, ahora sólo queda que los animales ayuden para que sea otra gran tarde”.
Festejos taurinos Pamplona, S. XIX